CIUDADANOS DE BURGOS, UNIÓN DEL PUEBLO LEONÉS, PARTIDO REGIONALISTA DEL PAÍS LEONÉS Y UNIÓN DEL PUEBLO SALMANTINO, CONTRA LA FUSIÓN POR RAZONES POLÍTICAS DE LAS CAJAS DE NUESTRAS PROVINCIAS.
Estamos asistiendo a un “chaparrón” de información sobre lo que se pretende hacer con las cajas de ahorro, y en ningún caso las ventajas que se supone deberían de justificar tal fusión, quizás porque no exista ninguna para las cajas, ni para sus provincias de origen.
El argumento es el Banco de España. Dice el Sr. Fernández Ordóñez, “a las cajas con problemas, o se fusionan o mano dura”. Pues bien, ejerza su responsabilidad y aplique mano dura y que “cada palo aguante su vela”, que es lo que procede. Los ciudadanos estamos tranquilos, son los políticos quienes están inquietos; los vividores de la política, que durante años han usado las cajas para pagar favores políticos y buscan una fusión para esconder sus trapicheos. ¿Tan inconfesable es lo que pretenden que no se puede hacer por medios regulares, “con luz y taquígrafos”?
Nada bueno se puede esperar del ocultismo. Los dueños de las cajas -que son los impositores- tienen derecho a saber qué es lo que se está “cociendo” a sus espaldas antes de que sea tarde. Las cajas no son propiedad de sus presidentes, ni tampoco su dinero (aunque a veces lo parezca), ni de sus directores, ni de sus consejos, ni siquiera de los señores Villanueva y López, si bien parece que por sus manifestaciones públicas, realmente lo sean.
Pero lo que sí han de tener muy en cuenta los actuales miembros de los consejos de administración de las tres cajas, es que ellos serán los responsables -en caso de que apoyen la fusión- ante la sociedad y ante la historia, por una decisión tomada en contra del criterio mayoritario.
No sabemos cómo terminará este trapicheo o intercambio de favores y puestos, pero tenemos claro que los partidos políticos territoriales, (acusados de provincianos desde Pucela), propiciaremos nuevas formas de protesta de la ciudadanía en contra del “sí o sí” vallisoletano. Sólo nos vale una fusión basada en el interés de las cajas y de sus ahorradores e impositores; no nos vale la excusa de fortalecer el tal (¿?) Sistema Financiero de Castilla y León, porque sabemos lo que eso oculta.
Otra faceta para justificar el no a la fusión, es el problema que se deriva sobre los trabajadores. Se anuncia que solo por el cierre de oficinas duplicadas, serian cerca de 1.500 personas las afectadas y habrá otras más, por otras duplicidades en los servicios centrales. De ello se deduce, que nos encontraríamos con el cierre de una empresa de 2.000 trabajadores. ¿A cuántas personas afectaba el cierre de Renault en Valladolid? y ¿cuánto dinero vamos a poner los ciudadanos de las 8 provincias de las Regiones de León y de Castilla La Vieja, que no somos Valladolid? ¿No es una incongruencia pagar para que no se pierdan puestos de trabajo en Pucela y por otra parte FORZAR las fusiones de las cajas, con lo que se perderán casi el mismo número de puestos de trabajo? Será porque si como es el caso, los puestos que se pierden son mayoritariamente fuera de Valladolid importan menos, además de que, desde el centralismo económico y político de la ciudad del Pisuerga se tienen otras perspectivas favorables con la fusión.
En este sentido, tenemos claro que no morderemos al anzuelo del enfrentamiento entre provincias. No tenemos ninguna duda de que el asunto Sede, es una forma de distraer la atención de la ciudadanía y de enfrentar a las opiniones públicas de las provincias que la pretenden. Si se discute sobre la ubicación de la sede, significa que se acepta la fusión. ¡No nos equivoquemos! Después de que se constituya la tal (¿?) nueva caja de Castilla y León (se llame como se llame), pronto quedará claro, ¡muy claro!, que la Junta de la cosa centralista autonómica, no va a permitir que el dinero de los ahorradores de “sus dominios”, logrados imperativamente en 1983, esté manejado desde otro lugar, ¡distinto y diferente!, que no sea su envidiada, absorbente y hegemónica Valladolid.
Este ENJUAGUE y/o TEJEMANEJE, no es un tema económico, ni de operatividad, ni de eficacia, ni siquiera derivado por la crisis. Se trata de una operación política, manipulada por los políticos de Castilla y León-Valladolid, como está ocurriendo en Caja Madrid: el capital de los ciudadanos, para que los políticos tengan más dinero para repartir e invertir en la compra de voluntades.
Las cajas, que forman parte de la propia sociedad provincial, en los municipios de sus respectivas Comarcas Naturales, tienen unos objetivos sociales con las que los Pueblos del Reino Leonés y de Castilla La Vieja se sienten identificados.
El problema de las cajas ha sido antes y lo es ahora, la ambición de los dirigentes que han llevado a las cajas a otras actividades, operaciones y ámbitos que no son los que las vieron nacer: facilitar el crédito al más débil y promover la cultura y la economía de sus territorios de origen.
Por todo lo que antecede SOLICITAMOS LA PARALIZACIÓN DEL PROCESO DE FUSIÓN DE NUESTRAS CAJAS DE AHORRO.
CiBu-UPL-PREPAL-UPS
viernes, noviembre 13, 2009
Manifiesto contra la fusión de las cajas: CIBU,UPL,PREPAL y UPSA
Etiquetas:
Ciudadanos de Burgos,
PREPAL
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