lunes, noviembre 13, 2006

SAN MILLÁN patrono de Castilla,12 de noviembre (Inocencia García de Andrés, Informativo Castilla nº 2 , 1979)

SAN MILLAN, Patrono de Castilla

El autor de este trabajo, soriano, aboga por una fecha para celebrar la "personalidad castellana Propone el 12 DE NOVIEMBRE, día de San Millán, como conmemoración especial, al margen de su significado religioso, que también le tiene, por ser un valor no sólo histórico, síno también característico de la genuina Castilla. La fecha viene a ser un dato de referencia necesario para afirmar la castellanía. Así, pues, éste es uno de los días señalados que deberíamos, los castellanos, poner en pí e.

El 23 de abril, fiesta de San Jorge, celebraban los aragonesas el "Día de la Región". Y, en verdad, quedó un tanto perplejo porque sabía de¡ San Jorge catalán y valenciano, pero no aragonés. He aquí, pues, que aragoneses, catalanes y valencianos tienen un mismo patrón y una misma enseña (con mínimas variantes). ,

No fue ciertamente, Santiago, el único Patrono celestial invocado en las horas angustiosas de la batalla de reconquista, cuando se conforman los diversos reinos peninsulares. Américo Castro mismo, para quien España es hechura de Santiago, alega varios casos en que se combatió bajo el amparo de Nuestro Soñor e invocando a Santa María, San lsidoro, San Millán...

"Fue, sin duda, la concepción vesallática de las relaciones con sus Patronos celestiales -escribe Sánchez Albornoz- lo que llevó a los hombres del Medioevo a "verles" cabalgar a su lado en la batalla. La precisión de personalizar y materializar la protección divina, llevará al pueblo a convertir el auxilio del Apóstol Santiago en su auténtica humanal intervención, al igual que la del Santo Arzobispo de Sevilla, lsidoro, cuyos restos descansan en León, cabalgando junto a los cristianos del reino leonés. (Sobre la portada del maravilloso templo de San lsidoro de León, y en los propios billetes de mil pesetas, puede verse al Santo Arzobispo montado en su caballo)".


SANTIAGO Y ALFONSO III

Antes hemos nombrado a San Millán, como uno de los Santos entre los invocados por los diversos reinos cristianos. Es el Santo invocado por los castellanos; el humilde monje riojano al que han escogido por Patrón que cabalgue con ellos. (Montado a caballo puede verse representado a San Millán, sobre la portada principal de¡ Monasterio de Yuso).

Berceo, en su Vida de San Millán, y después de contar la doble promesa de los votos legendarios a Santiago por Ramiro II y a San Míllán por Fernán González, refiere la maravillosa aparición en la batalla de los dos celestes patronos de leoneses y castellanos, y alaba la milagrosa intervención de ambos:

"non quisieron embalde la soldada levar
primero la quisieron mereçer e sudar tales
sennores son de servir e onrar..."

El triunfo y difusión de¡ culto de Santiago comienza con el reinado de Alfonso III; convirtiéndose con el Arzobispo Gelmírez, en la mayor atracción emocional y espiritual de la cristiandad toda. Sin embargo, en el texto de¡ "Antifonario de León", obra de la primera mitad del siglo X, no se incluye la festividad de Santiago; y la Biblia leonesa de 910, afirma: "apud Hierosoliman humatus iacet" (yace enterrado en Jerusalén). De ello concluye Fray Justo Pérez de Urbel que "en el León del siglo X, hubo cierta hostilidad contra las tradiciones jcobeas, como la hubo más tarde, en el ambiente eclesiástico toledano de los siglos XIl y XIll".

Por el Juglar del Cid sabemos que Alfonso VI invocaba habitualmente, no a Santiago, sino a San lsidoro. Sin embargo, San lsidoro, Patrono del reino de León, será desplazado por Santiago, y, tras la unión de León y Castilla, se impondrá también en Castilla el patrocinio de Santiago , desplazando a San Millán. Y esto no sin oposición castellana. Así, en tiempos de Enrique II (1373), la Universidad de Ciudad y Tierra de Ávila llegó a negarse a pagar el voto a Santiago, y sus procuradores llevaron el asunto a Cortes.

El patrocinio de Santiago se hace, finalmente, general en la España Imperial y sus guerras "divinales" contra indios, turcos y herejes.


UNA FECHA PARA CASTILLA

La casi nula conciencia regional de Cestilla; el desconocimiento de sus símbolos y la auténtica tradición de los pueblos castellanos, alcanza especialmente al Patrono San Millán y a la realidad de cómo se ha vivido históricamente la fe cristiana en Castilla. ¿Quién se acuerda hoy de San Millán en Castilla, si no es ese pequeño rincón riojano de la Cogolla? ¿Quién puede afirmar hoy una Iglesia realmente encarnada en la sociedad castellana, como fue su mejor tradición?.

La "Castilla Imperial" y Santiago, no son realidades castellanas. Castilla, por otra parte, no tiene ninguna Patrona cómo Cataluña, Asturias, Extremadura.... sino que cada Comunidad Castellana tiene su propia Patrona. Símbolos de la Castillo comunitaria y popular son esos santuarios de la tierra y el propio San Millán, único que extiende su patrocinio a toda Castillo a lo largo de la historia, expresiones de la Castillo popular, comunera y autonómica.

Porque San Millán, que cabalga junto a los castellanos y con pendón rojo, en contraposición al Santiago de pendón blanco, es un Santo humilde y popular que multiplica el pan y el vino para un pueblo que acaba de salir de la estrechez de las montañas y busca tierra en su necesidad.

Símbolo de una Iglesia popular, plenamente identificada con la lucha de un pueblo por su subsistencia y libertad; inspiradora de los mejores principios de la sociedad castellana tradicional, cuales son la igualdad de las personas y la solidaridad comunitaria.

Si han sido precisamente las fuerzas progresistas, las que han reclamado en Aragón el patrocinio y la celebración del día de la región aragonesa en la fiesta de San Jorge, los castellanos, sin ánimo de copiar de nadie, pero sí de rescatar nuestros mejores símbolos, hemos de recuperar a San Millán, humilde y popular, para bien de nuestra región (y de la propia Iglesia): y señalar especialmente esta fecha para la celebración de la personalidad castellana.

I. García de Andrés
Castilla nº 2 Enero-febrero 1979

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