ELEGÍA POR LA MUERTE DEL HISTORIADOR JOSEPH PÉREZ
(fallecido en Burdeos, a 8 de octubre de 2020, pero para siempre “castelianista” y revitalizador de Castilla)
Pérez, Pérez, el francés
que sólo siéndolo pudo
conocer a esta Castilla
que en España es campo mudo.
Joseph, Joseph Pérez, fingen
medievales y nocturnos
a los comuneros, siendo
quienes apuntan al futuro.
Y que llaman lo moderno
a Carlos lleno de humos,
saqueador con impuestos
de Castilla, rey absoluto.
“¡Yo te hiciera relativo
Carlos el de arcaicos usos,
que Castilla quiere ser
suya, no a otro ni a ninguno
-le dice Juan de Padilla-
emperador y verdugo!:
¡el Régimen señorial
no es nuestro nuevo rumbo!
¡El bien común te proclamo
y no la propiedad de uno
sobre reino tan pujante
cual Castilla, no de un grupo!
¡Queremos ser nuestros reyes,
no de un imperio confuso,
sólo así paguemos sueldo
para nuestros siervos públicos,
para que nos sirvan siempre,
y que nos sirvan sin lujos.
Es la tradición castellana,
de Castilla el propio uso,
entonces siga Castilla,
en pos de todos el triunfo.
Dicho en Castilla y que lo oiga
Carlos y todos los burgos!”.
Gracias, Pérez, el francés,
gracias de hacernos adultos,
y saber que lo moderno
era el comunero impulso.
Gracias, Joseph, por probarnos
que en los Siglos de Oro hubo
no con mi Castilla o España,
sí guerra Europa y Habsburgo.
en la que desangraría
la Casa de Austria con duro
látigo el caudal castellano
sólo por austriaco gusto,
que a Castilla arruinaría
pese a ser el más robusto
árbol que en todos los tiempos
habíase erguido en el mundo.
Gracias a ti, historiador,
que con mis versos saludo.
¡La luz de los documentos
sí les da histórico triunfo
a comuneros de Castilla,
y a Carlos dejan impuro!
Pero moderno y de hoy
era el comunero pulso
que aún a contemporáneo
apunta, ¡y en vario punto
a lo postcontemporáneo
pues hoy mismo espera el triunfo
su pensamiento y su "Ley
Perpetua", que es el fruto
que aun aguarda tomemos
sus pétalos de futuro!
Primera Constitución
fue en Comunidades el sumo
regalo que aquella Castilla
dejó para siempre al mundo.
“Santa Junta Comunera
de Ávila” la pone en curso,
y hoy nos asombra y nos pasma,
ver XVI tan profundo.
Y sepan todos los pueblos
que aspiren a ser maduros
que aún no se consiguió
el comunero murmullo,
pues bien de parte procuran
los diputados augustos
que se llaman “señorías”
y escurren al pueblo el bulto.
La sociedad es quien debe
pactar su sueldo y tributo
y quien tenga sobre ellos
mando continuo y seguro.
Un Poder Social real
permanente en sus asuntos
o siguen siendo imperiales
líderes hacia el abuso,
que no el bien común lo buscan
sino ventajas de grupo
y compactos todos ellos
ventajas de casta en conjunto.
Que sepan todas las gentes:
¡en Castilla está el profundo
cambio que escaños no sean
de delegados Habsburgo!
¡Dado en Castilla, y que sepan
mensaje de este discurso,
todas las tierras del orbe
que quieran cambiar el mundo!
Juan Pablo Mañueco
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